Valeria Racciopi (SAE), editó la película Planta pemanente, está nominada al premio a Mejor Montaje de películas en competencia Internacional que otorgará EDA en la 34ª edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y nos cuenta el proceso de edición de esta película:
Llegué a Planta Permanente cuando ya había un armado. Uno de los principales desafíos fue la velocidad con la que tenía que volverme parte del proceso, empaparme de sus referencias, tratar de entender muy rápidamente cuáles eran las necesidades de la película y las búsquedas del director, sin haber participado desde el principio. Pero de alguna manera ese precipitarme implicaba una frescura que la sentimos también como una ventaja. En ese contexto el director fue muy generoso habilitándome un espacio de trabajo de mucha libertad creativa.
Al tener leído el guión y visto el armado, y a partir de la tensión entre ambos, tuve dos intuiciones-objetivos, una del orden estructural, otra del orden del trabajo tonal de las actuaciones.
Un pilar fundamental para poder trabajar con la intensidad que necesitábamos fue el trabajo de la coordinadora de postproducción, Josefina Castillo Carrillo, que nos solucionaba cualquier tipo de problema o consulta técnica y proyectaba incluso las posibilidades futuras de vfx y-o color.
Empezamos a trabajar lo tonal primero, lo actoral, tratando de potenciar las modulaciones, complejizar y agregar matices buscando provocar una mayor empatía -una identificación íntima con los personajes-, así nos desplazamos hacia una zona de mayor complejidad humana, cotidiana, en la que no sólo nuestros personajes estaban habitando sino potencialmente cualquiera de nosotros, es decir cualquier espectador. Al mismo tiempo trabajamos dramatúrgicamente nuevos textos que pudieran aludir a universos que estaban en el guión pero sentíamos todavía un poco distantes en la película, los repusimos o remarcamos a partir de señales lingüísticas, pequeñas variaciones que potenciaron y direccionaron sentidos.
Lo mágico fue que a través de ese trabajo tonal llegamos a la necesidad del cambio estructural -aquel inicialmente intuído- la modulación misma de lo actoral nos lo pidió de manera orgánica. Para mí se había vuelto necesario hacer ese cambio para lograr transmitir la idiosincrasia de la película, la mirada de dirección. Y digo que fue mágico porque para mí es una de las más placenteras instancias de montaje cuando el armado fluye por sí mismo, encuentra sus lógicas y pide sus variaciones, y en Planta Permanente se dió de esa manera.
Funciones (día, hora y sala):
Viernes 15 de noviembre, 12,00,Teatro Auditorium – Sala Astor Piazzolla.
Viernes 15 de noviembre, 19,00, Teatro Auditorium – Sala Astor Piazzolla.
Sábado 16 de noviembre, 14,30, Teatro Auditorium – Sala Astor Piazzolla.