EDA En Pantalla – BIA, un mundo al revés
Durante el mes de febrero se estrenó el episodio especial de Bia, “Un mundo al revés”. En este episodio especial, de 90 minutos, se intercambian los roles de buenos y malos, lo que sorprenderá a quienes vieron la serie. Aquí, nuestras socias Lucrecia Caramagna, la editora del episodio, la asistente Sofía Viglioglia y Cris Miller, la coordinadora de post-producción nos cuentan acerca del proceso de montaje. ¡Felicitamos al equipo por el estreno!
¿Cómo está compuesto el equipo de post producción?
Cris: El equipo de post-producción de este episodio fue un desprendimiento del equipo de la serie.
Como responsable del montaje del episodio, propuse a Lucrecia Caramagna, que ya había estado a cargo de todos los episodios especiales de la tira (entre ellos el primero y el último de la serie), y que ya tenía una excelente relación con Jorge Bechara, el director. Reconozco además, que después de muchos años trabajando juntas, sabía el valor que ella podía agregarle al material.
Lucrecia: Como en Nonstop se cuenta con la posibilidad de que todas las áreas se encuentran en el mismo edificio, desde el rodaje hasta el export final, todxs lxs integrantes del área de postproducción participaron en simultáneo durante esos meses de trabajo. Yo estuve a cargo de la edición offline, la asistencia la realizó Emanuel Langlais y el ponchado de las tomas y deliveries a color, a VFX y a sonido los realizó Sofía Viglioglia. La edición online la llevó a cabo Pablo Zito.
Sofía: Comenzamos pruebas y armados a finales de 2019. Me ocupé de la selección de tomas con la coordinadora Cris Miller y el director, luego lo vimos con el cliente y le pasamos lo seleccionado a Lucrecia.
Lucrecia: El episodio tiene intervención del departamento de VFX en muchas de las escenas, y el equipo de LASP (La Sociedad Post) trabajó paralelamente con la isla de edición. Trabajamos con productores musicales increíbles como Emilio Olivero, Anahí Cascabelo y Fernando Vila, quienes aportaron muchas ideas en el transcurso del proceso de montaje ya que todo lo que se escucha es música original. Pero también intervino el musicalizador de la serie Lucas Lefevbre.
El color lo realizaron Melina Rico y Laura Larrosa y la postproducción de sonido la hicieron Gonzalo Barillaro y Luis Pérez.
Este episodio especial de Bia nació a partir de la serie, aunque lo que sucede ahí es lo opuesto. ¿Cómo fue la experiencia de editar un episodio tan distinto?
Lucrecia: La idea de realizar un episodio 121 (la serie contaba con 120 episodios, en total en dos temporadas), surgió de uno de los directores creativos, que es también productor ejecutivo de Disney, Guilherme Lessa. La intención era jugar con el lado B de los personajes y representar todo lo contrario al mundo convencional de Bia, es decir todo lo que no ocurre a menudo en el universo de las series de Disney Channel infanto-juveniles. Hay traiciones, ambición, mentiras y competencia por conseguir el objetivo a cualquier costo.
Cris: La realidad es que la posibilidad de construir un universo alternativo para los personajes de la tira fue muy interesante. La búsqueda de ese relato diferente además, me dio la posibilidad de trabajar con el director, Pegsa Group (la casa productora) y Disney de una forma totalmente distinta a como lo venía haciendo.
Lucrecia: El guión estaba pensado para que aquellxs que siguen la serie puedan identificar los chistes internos que tiene cada personaje. Además de ser un desafío actoral para el elenco, también fue un desafío a nivel formal porque a la puesta de cámara, la dirección de fotografía, los vfx, el montaje y el universo sonoro también se les dio un tratamiento diferente a lo esperado.
Cris: Si bien tuve mucha más libertad creativa, también las expectativas sobre el resultado eran muy altas. Un ejemplo de esto fue la decisión de que el 90% de la música fuera original.
¿Qué desafíos o particularidades tuvo el montaje de este proyecto?
Lucrecia: Los desafíos en el montaje fueron de dos tipos: el primero fue el armado de ciertas escenas complejas, ya sea por todo lo que había que contar en ellas o también porque algunas incluían clips musicales. Y el segundo tiene que ver con que al final del episodio hay un show con tres canciones, y había que abordarlos como recitales.
En relación a las escenas, luego de hacer el armado pautado desde guión y viendo conjuntamente con Cris y con Jorge el armado en su totalidad, empezamos a evaluar qué modificaciones hacer.
La escena en donde se presenta a casi todos los personajes en una faceta diferente a la que el público está acostumbrado a ver, fue compleja de armar porque había muchos planos y muchas tomas por plano. Los actores tenían que entrar paulatinamente a un gran salón y debían ir formando un círculo. Esa coreografía debía ser orgánica y las miradas incisivas entre ellxs tenían que crear el clima de tensión por el anuncio importante que estaban esperando.
La escena dura alrededor de cinco minutos y la trabajamos prácticamente hasta el final. Además el universo sonoro en esa escena era muy importante porque cada uno de los protagonistas tiene su leitmotiv.
También teníamos escenas con clips musicales internos, momentos donde ciertos personajes expresan su amor por lx otrx y eso obviamente implicaba un cambio de criterio en la edición. Hay un personaje que está sufriendo el caso del amor no correspondido y hace un despliegue musical para cotejar a la protagonista. Cuando la escena quedó planteada como era originalmente, notamos que la duración del tema musical no nos permitía darle todo el desarrollo que merecía. Desde la edición, gracias a que tuve acceso a los stems pudimos darle más vuelo y al conversar el planteo con lxs productorxs musicales, nos contaron que precavidamente habían grabado variantes de la letra con el actor, lo que hizo que se enriqueciera mucho más la resolución de la escena. También se trabajó conjuntamente con el departamento de VFX porque Bia, interactúa en su mundo interior con situaciones que imagina y había planos planteados para que el desenlace de la escena se haga con ese tratamiento. Desde la edición armaba los bocetos y luego LASP trabajaba la idea con el director.
Cris: Nuestro primer offline se adelantó veinte días para que los actores pudieran ver el episodio antes de fin de año. Los conciertos y las escenas finales (doce minutos del episodio) se habían grabado solo unos días antes. Hubo que hacer un montaje «de emergencia» mientras terminamos de armar el episodio con Lucrecia .
Lucrecia: Trabajamos diez semanas aproximadamente en ese corte y se hizo un screening con actores y productores. Para esa presentación, yo no tenía tiempo de hacer un pre armado de los recitales, entonces Gabriel Remón (uno de los editores de la serie) y Emanuel colaboraron en hacer el armado previo.
Pablo Zito fue quien hizo el chequeo general, colocando transiciones, y vfx. Fue un compañero invaluable quedándose conmigo hasta las 3 A.M. para dejar listo el export al día siguiente.
Luego de tener todo el episodio ajustado y aprobado, pasamos a la etapa de los recitales. Ese proceso llevó alrededor de cuatro semanas también.
Hay dos temas pop y un tercero más rockero, la intención en los temas pop era destacar la presencia de la protagonista y sus amigas. Las grúas ayudaron a dar esta sensación de espectáculo, jugando con la relación con el público y las pantallas.
En el último recital están todos los personajes del episodio en el escenario y cada unx de ellxs canta y desarrolla una parte de la coreografía. Había muy pocos extras y los contraplanos donde debían verse las gradas con personas, se pudieron usar gracias a la corrección de color y la puesta de luces.
¿Cómo fue el flujo de trabajo? ¿Qué software usaste y qué desafíos tuviste al respecto?
Cris: Se editó en Premiere Pro, el audio se hizo en Protools y los músicos usaron Cubase para la música y la adaptación de las canciones. Para los dailies o los envíos de armados a dirección y a la producción, usé el Sony CI. Dentro de esa plataforma se armaron las devoluciones y comentarios.
Lucrecia: Paralelamente a que yo iba armando escenas, Cris y Sofi visualizaban y ponchaban el material por dos motivos: los decorados se estaban desmontando porque la serie se había terminado y había que asegurarse de que no hubiera nada que regrabar y también hubo varias escenas que el director de fotografía Jorge Fernández, tenía que revisar con la colorista. Entonces casi todo el planteo de color del episodio se hizo en simultáneo con la etapa de offline.
Cris: Como se usaron además exteriores y vestuario nuevos, no hubo mucho tiempo de hacer las pruebas técnicas, lo que siempre repercute en la post con más doblajes, más vfx y más tiempo en color. Por todo esto la cantidad de material que vino del set fue el cuádruple de lo que llegaba por jornada normalmente.
Sofía: Poníamos las escenas armadas de Lucre en la línea de tiempo y las enviábamos al cliente una vez aprobadas. Las escenas se enviaban como «PREARMADO» a LASP. Con todos los protocolos de rótulo para que se comenzara a realizar el boceto de efectos a incorporar. Luego en LASP se encargaban de tramitar con el cliente la aprobación de los efectos incorporados.
Cris: Desde la Sociedad Post (LASP) se habían planteado piezas específicas desde el guión: la apertura, los créditos finales, “el plan” y las transiciones a los clips, pero todo el resto de las las piezas gráficas del episodio se plantearon en la isla y surgieron de la necesidad de cambiar el ritmo de las transiciones entre escenas. Esto trajo un cambio importante en cómo estaba pensada la participación de la casa de post dentro del episodio. Estos “pushs” sofisticados implicaron muchisima paciencia y horas de trabajo de ambos lados.
Lucrecia: Los recitales se grabaron a 29.97 fps, a diferencia del episodio que estaba a 23.98 fps. La propuesta era darle otra calidad a estos momentos. Se trabajó respetando el frame rate original y una vez terminados y aprobados los recitales, se hizo la conversión. Se grabaron a nueve cámaras y tres de ellas eran Go Pro que iban en los instrumentos de lxs músicxs.
Sofía: Una vez aprobado el corte final se volvieron a enviar todos los planos a LASP con color y ellxs los fueron devolviendo con la animación definitiva.
¿Cómo fue el trabajo con el resto de los departamentos? (Dirección, sonido, gráfica, etc)
Cris: Con dirección hubo una relación excelente, hubo un diálogo y espacio para proponer desde la preproducción del episodio.
Lucrecia: Fue muy gratificante. Jorge trabajó en equipo con nosotras en la isla y tuvimos un diálogo de ida y vuelta muy interesante.
Yo particularmente disfruto mucho haciendo una propuesta de offline con el sonido trabajado, buscando generar un boceto lo más completo posible para que se entienda la idea. Me gusta plantear los ambientes, buscar los sfx y que estén integrados al universo. Siempre con la intención de que cuando se le de play todo fluya, más allá de que luego se pase al trabajo más fino de postproducción de sonido. En este proyecto particularmente, cuando se pasó al área de sonido, ya había muchas decisiones tomadas desde la isla así que hubo una fuerte bajada para que se mantuviera ese criterio hasta el final.
¿Hay algo más que te gustaría agregar sobre esta experiencia?
Cris: Como nota de color yo no estaba segura de manejar la post del telefilm. La realidad es que lo hice en forma simultánea con los episodios que faltaban de la tira.
Pude hacerlo, porque además de poner muchas horas de trabajo, tenía un equipo leal que “bancó” esta situación y me ayudó de todas las formas posibles. El equipo de Bia fue el equipo con el que todx director de postproducción sueña.
Lucrecia: Quiero agradecer la libertad para experimentar proponiendo este proyecto que presentó retos y nuevas búsquedas, al equipo de edición hermoso del que fui parte durante casi dos años y especialmente a Cris Miller y Jorge Bechara porque me eligieron para hacer el montaje.
Cris: Sin la dedicación del director, la profesionalidad de toda la técnica de Nonstop y el apoyo enorme que recibí de toda la producción ejecutiva de Disney, no hubiera sido posible encarar el proyecto como lo hicimos y además llegar en tiempo con la entrega durante la cuarentena.
Lucrecia: Sentir que se puede trabajar de igual a igual con dos personas que tienen tantos años de experiencia es sin dudas algo que atesoraré siempre con mucho cariño.
Admiro el respeto y compromiso con el que Jorge asume su rol como director. Es un gran amante del cine y eso sin dudas trajo mucha inspiración en este camino recorrido.
Y a Cris Miller le agradezco profundamente la generosidad por todo lo que sabe. Le agradezco cada una de nuestras charlas en la isla pensando soluciones, aportando cambios que le dieron un vuelco interesante al relato, y que me haya dado el espacio para que mi pasión por darlo todo en un proyecto pueda desplegarse y ser real.
Fuimos un equipo creativo y horizontal donde el acuerdo tácito era potenciar el relato con todos los recursos que estén a nuestro alcance.
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